¡EL PEQUEÑO BÚHO QUE PODRÍA!

Oli el búho les da a los niños el valor para celebrar sus dones especiales

Sobre Oli

La mayoría de los niños en un programa de salud conductual están un poco asustados y abrumados. Aquellos que reciben nuestros servicios, por ejemplo, pueden no entender por qué se sienten deprimidos y enojados, y pueden tener dificultades para expresar sus sentimientos. Los padres y cuidadores también a menudo se sienten aislados y solos y no saben cómo ayudar.
El Búho Ollie puede ser tan pequeño que cabe en tu mano, pero es tan valiente y sabio como cualquiera criatura fuerte del bosque. Pero Ollie no siempre fue tan valiente ni tan inteligente. Su vida, ves, empezó un poco diferente que los otros búhos. Ollie nació en un bosque muy grande y vivió con el búho Abuela en un árbol alto. Y aunque el nido fue muy cómodo y acogedor, y aún amaba a su Abuela mucho, tenía miedo y era un pajarito tímido. Nunca se sintió que lo aceptaron los otros búhos y eso le hizo sentir triste. El Mundo Grande fue miedoso para Ollie. No tenía muchos amigos y no jugaba con los otros mochuelos porque a veces no podía hacer las mismas cosas que ellos. Los otros búhos se burlaron de él y lo hicieron sentir muy inseguro. Los miraba y se preguntaba por qué no era tan alegre ni ligero como ellos. Todo parecía tan difícil para Ollie. Entonces, un día, la Abuela de Ollie lo llevó a un lugar especial donde había unos amigos especiales que lo ayudaron con algunas cosas que eran difíciles para él. Al principio fue difícil abrirse y hablar con ellos, pero pronto se dio cuenta que el hablar hizo que las cosas se sintieron mejor. Fueron bondadosos y escucharon muy bien. Se sintió que lo entendieron; ¡no lo hicieron sentir extraño ni raro…de hecho, lo hicieron sentir ESPECIAL! Aprendió mucho a través de hablar y aprendió que no estaba solo, y que si, a veces la vida era difícil, pero que él era fuerte y capaz. Aprendió que el hecho de que había podido hacer cosas difíciles, podía volver a hacerlos. Aprendió que aunque la vida podría ser miedosa y podía sentirse imposible, todo eso no significaba que no podría ser feliz. Aprendió que era valiente. No tardó casi nada hasta que Ollie se sintió como un búho feliz. También hizo unos amigos durante todo eso, otros mochuelos que tal vez eran un poco diferente que un búho promedio, pero divertido igual. Al lo mejor no era como otros búhos, pero el podría VOLAR tan alto como sus sueños lo llevaran.